¿Sabías qué el principal depredador de los océanos en este preciso momento, es el plástico?
Lamentablemente el plástico es el principal factor contaminante y determinante de nuestros océanos, tanto para la biodiversidad, como para su entorno (sin mencionar el calentamiento global y acidificación de estos). Además de la contaminación provocada por los plásticos, se suman las colillas de cigarro y derivados del petróleo, los cuales han llegado para quedarse. Vivimos en una sociedad floja, en la que urge generar consciencia y cambios que nos lleven hacia una cultura de reciclaje.
Normalmente cuando nosotros estamos en nuestros hogares, pensamos que, al arrojar nuestra basura, ésta desaparece cuando el camión de la basura se la lleva y nos despojamos de nuestro problema con los residuos que generamos. Pero no es así, aquí es donde comienza un círculo vicioso, ya que al no hacernos responsables de los residuos que desechamos, éstos, al llegar al vertedero, comienzan a ser un problema. Ya que animales carroñeros, oportunistas, entre otros, comienzan su búsqueda de alimentos, y con esto comienza también la destrucción de las bolsas para cumplir su objetivo, alimentarse. Sin embargo, estos animales se alimentan de todo, haciéndoles sentir satisfecho, y, al fin y al cabo, finalizan muriendo por inanición.Esto mismo ocurre en los océanos con los animales que son filtradores, como por ejemplo las ballenas, mantas, móbulas, etc.
Se dice que el 90% de la basura arrojada al mar no es porque el ser humano la lanza directamente. De hecho, es en los vertederos donde esta basura es destruida y es aquí donde comienza su recorrido hacia el mar. Ustedes se preguntarán cómo, y esto se debe a que, mediante las tormentas, el viento y lluvias, se transportan estos sedimentos a los ríos, y los ríos principalmente desembocan en el mar. Muchos hemos observado esto en fotos y videos sobre la contaminación que existe en los océanos, en las llamadas “islas de plásticos”.
Luego de esto, las corrientes arrastran estos sedimentos hasta llevárselos a distintas partes, de las cuales no saldrán más, como los giros (gyres en inglés). Estas corrientes circulares atrapan todo lo que venga para jamás devolverlo.
Aquí es donde se genera la mentira más grande, la cual dice que el plástico es biodegradable, pero ¿a cuánto tiempo? Desde el primer plástico creado, éste no ha sido degradado, solamente se fraccionan hasta ser organismos más pequeños, conocidos como microplásticos.
Los plásticos al estar en contacto directo con el sol y los rayos UV, se comienzan a deteriorar y fraccionar en partículas microscópicas, las cuales, debido a sus colores, atraen a distintos animales que se alimentan por filtración, dándoles a futuro, su muerte. Por otra parte, una bolsa se asemeja mucho a una medusa, uno de los alimentos favoritos de las tortugas marina. Quizás para nosotros es fácil distinguir una de la otra, pero para la tortuga, no lo es.
Por estas grandes razones ya es momento de hacernos responsables de nuestra basura, de nuestras acciones y consecuencias que estas conllevan.
¿Cómo podemos hacerlo?
Primero, tiene que existir un cambio de hábitos. Los seres humanos nos reconocemos por razonar y adaptarnos a distintas circunstancias, por ende, tenemos la capacidad de tomar valor y paciencia para poder generar este cambio, el cual básicamente consiste en separar nuestros residuos de forma responsable, para que éstos no lleguen a nuestros océanos, evitando que sean ingeridos por otras especies.
El principal problema es el plástico de un solo uso, como bombillas, bolsas de plástico, aguas embotelladas, cubiertos, bandejas, y un sin fin de otros elementos. Por lo tanto, de ahora en adelante, la misión es dejar de consumir estos elementos y llevar con nosotros nuestros propios insumos para disminuir este consumo desenfrenado. Existen varias opciones, como bolsas de género o tela, llevar nuestra propia botella para el agua y rellenarla, utilizar bombillas de bamboo o acero inoxidable. A lo largo de nuestro país, existen contenedores donde se puedes realizar separación, desde los plásticos (botellas, bidones, etc), hasta los metales, papeles, cartones, etc. Y así, un sinfín de ideas para hacer de nuestro planeta más sostenible.
Son estos pequeños grandes cambios que podemos hacer con el fin de poder ayudar a quienes no saben qué está pasando (animales), y siguen muriendo producto de nuestra irresponsabilidad, ya que no saben qué están haciendo mal, no son los culpables, por lo cual tenemos las herramientas e ideas para poder hacerlo hoy, ahora, donde aún tenemos tiempo y ser los agentes de cambio para el futuro.
Por el bien tuyo, de los animales, de los océanos, la naturaleza y que las futuras generaciones puedan disfrutar de lo que podemos ver hoy. “Pan para hoy, hambre para mañana” Saquemos ese concepto de nuestras cabezas y seamos responsables de nuestras acciones y consecuencias que ya pueden ser vistas día a día.
Autor: Diego Cortés Peña
Fotografía: Diego Cortés Peña
Fotografía: Diego Cortés Peña
1 comentario
Hola! Me encanta que se preocupen por el medio ambiente, así todos tomamos más conciencia de los seres vivos que nos rodean, reduciendo el consumo de plástico, reutilizando y no contaminando las aguas! Gracia OmCleaner